El 12 de marzo de 2008 se celebró por primera vez el Día Internacional del Glaucoma para generar conciencia sobre este padecimiento, que de acuerdo a la Organización Mundial de la Salud es la segunda causa más común de ceguera en el mundo, solo después de la catarata, pero la primera irreversible. En el 2020 se calculaba alrededor de 70 millones de casos en todo el mundo, de los cuales, en México se encontraban cerca de 1.5 millones. Este padecimiento podría ser reversible en un 90 por ciento si se detecta a tiempo.

El glaucoma es una enfermedad en los ojos, causada generalmente por una hipertensión ocular que sucede después de una acumulación de fluido en la parte delantera del ojo, que en exceso, aumenta la presión y daña el nervio óptico. Los dos principales tipos de glaucoma son:

Glaucoma crónico de ángulo abierto es el más común, se produce gradualmente, cuando el ojo no drena el fluido como debería, la presión del ojo aumenta y empieza a dañar el nervio óptico. Este tipo de glaucoma no es doloroso y no causa ningún cambio en la visión al inicio.

Glaucoma de ángulo cerrado/ángulo estrecho se produce cuando el iris de una persona está muy cerca del ángulo de drenaje en el ojo y lo bloquea, en este caso, la presión ocular aumenta rápidamente y se considera una emergencia ocular, ante esta situación se debe acudir a un oftalmólogo de inmediato, de lo contrario, se podría perder la vista en su totalidad.

Solo 10% de quienes lo padecen lo detectaron en etapa temprana, aunque los síntomas iniciales son poco comunes, se recomienda poner mucha atención en caso de presentar alguno de estos signos:

  • La visión se vuelve borrosa de repente.
  • Dolor intenso en el ojo.
  • Dolor de cabeza.
  • Dolor de estómago (náuseas y vómito).
  • Ver anillos o aureolas de arcoíris de color alrededor de las luces.

Las personas más propensas de padecer esta enfermedad son:

  • Mayores de 60 años.
  • Con antecedentes familiares de glaucoma.
  • De ascendencia africana, hispana, o asiática.
  • Con presión ocular alta.
  • Con hipermetropía o miopía.
  • Quienes sufrieron una lesión en el ojo.
  • Personas que hagan uso prolongado de esteroides.
  • Con córneas delgadas en el centro.
  • Quienes sufren de estrechamiento del nervio óptico.

QUE LA OSCURIDAD LOS PROTEJA

SANDYMOON